31 de marzo de 2011

Tal vez mañana

La culpa siempre se cuela en los duelos.

Es una pequeña tirana que inocula su veneno y hace que el dolor
se haga un poco mas amargo. Y de un momento a otro aparecerá
con su voz acusadora a hacer reproches, acusar, juzgar,condenar.
"Si hubieras hecho tal cosa", "Si no hubieras dicho tal otra"...
La lista de recomendaciones a destiempo suele ser interminable y sumamente dañina.
Su presencia puede llegar a hacer de nuestro duelo una tortura.

¿Cómo trabaja esta infatigable carcelera?
Inyectando su veneno de manera sutil pero poderosa. Con astucia.
No lo hace a los gritos ni de manera llamativa.
Parece, más bien, una de esas manivelas de los viejos
cinematógrafos que gira incansablemente y no cesa de proyectar
las mismas escenas una y otra vez,
hasta convencernos de que somos malas personas y que las faltas
que hemos cometido no merecen ser perdonadas.

Y asi, va chupándose el resto de energía que aún nos queda, hasta
dejarnos como despojos arrojados a merced de los críticos y
jueces implacables que pueblan nuestro agitado interior.

La culpa es hipnótica y va lavando los restos de estima saludable,
que poseemos hasta dejarnos secos de amor propio, huérfanos
del aprecio que se necesita para sentirse una persona digna y
valiosa, y sujetos a cualquier valoración menos a la nuestra.

Cuando empezamos a definirnos más por nuestros desaciertos
que por lo que hemos hecho bien, estamos dándole la llave maestra
de nuestra vida a esta guardia cárcel e hipotecando nuestra felicidad
futura.

Las caídas no son estados permanente, al menos que así lo decidamos
nosotros.Y las faltas que solemos cometer son parte de este caminar
que nos caracteriza.

¿De dónde sacamos la idea de que la perfección y la infalibilidad
absolutas será parte de nuestra condición?

Victoria Branca
libro: Tal vez mañana

24 de marzo de 2011

Vislumbramos tu ausencia

Marcos, hoy, como una oración, he vuelto a tus altares, a tus fotos, a los recuerdos, a mi dolor que lucha contra el fácil acomodo del paso del tiempo...

Desde la cima de la paz
nos transfigura el aleteo
que roza el alma y su deseo
y en nuestro sol todo es solaz.

Tú estás ausente. Tú te has ido
de nuestro mundo, mas dejaste
esas tus huellas: ¡Forman parte
de la plegaria y el quejido!

En la mañana vislumbramos
tu suave paso en primavera
y en el ocaso en tu cimera
presencia ausente nos quedamos.

Siempre que en toda criatura
es el asombro el que nos gana
nuestra mirada ya desgrana
toda la luz que transfigura.

Tu ausencia viva vivifica
la ausencia nuestra en el abismo
y al transformar cine y cinismo
el alma en ti se purifica.

Sin ti seríamos sombrías
y mortecinas existencias,
contigo, en cambio, las ausencias
son las celosas selosías.

Autor: Luis Vázquez Fernández.

22 de marzo de 2011

Poemas a la Muerte


Morir no duele mucho
nos duele mas la vida.
Pero el morir es cosa diferente
tras la puerta escondida:

la costumbre del sur, cuando los pájaros
antes que el hielo venga,
van a un clima mejor.Nosotros somos
pájaros que se quedan:

los temblorosos junto al humbral campesino,
que la migaja buscan,

brindada avaramente, hasta que ya la nieve,
piadosa hacia el hogar nos empuja las plumas.

Emily Dickinson

comentario: 16.3.11

11 de marzo de 2011

solo somos muerte ?


No se me va de la cabeza que con "hilvanando infinitos" atraje la muerte a mis días, a mi existencia, pero esencialmente la vida es un -error- de la muerte eterna, que todos portamos desde el momento que descubrimos la primera luz

sin prisa

Hay días que los muertos te invaden:
la agenda
el calendario
el minutero
incluso el tintero.

Hay noches
en que la muerte perdona
distrayéndose adrede
y sólo se posa en tu cama.

Hay meses
sin muerte
pero la nuestra tiene su día
y hoy por hoy seguimos despiertos.

Hay semanas
de fosas y nichos vacíos
olvidadiza guadaña
de confiado corte inofensivo.

Hay horas
llenas de silencios enlutados
en que la muerte
tararea sus solemnes himnos.

Hay segundos
desbordados de seres aniquilados
cuerpos helados por el blanco amanecer.

Y el silencio mortuorio
redobla incansable en los tímpanos
esperándonos insaciable
sin prisa.

Autor: Félix Martín Franco Poemario: "Hilvanando Infinitos" (ed. 2007)

8 de marzo de 2011

Día de la Mujer (siempre + trabajadoras)

Sirva como pequeño homenaje a todas las mujeres.
Revolviendo versos de Machado ("El Maestro") recordé una canción del mismo título de Patxi Andión y
después apareció este tema que tantas veces grité (cantar es otra cosa)

Gracias MU JE RES, por ser como sois...... va por ustedes vosotras.





7 de marzo de 2011

Coplas para olvidarte mejor

Es significativo comprobar como textos creados con otros sentimientos de ausencia, dolor, separación, son totalmente válidos por la peor de las separaciones.......... el fallecimiento de un hijo. (Flx)

Qué tanto te quiero a ti
que ahora que tu no estás,
no estoy tampoco yo en mí;
ni siquiera existo más.

Tu ausencia estrá presente
y tu vacío está aquí;
nada soy contigo ausente
no existo si estoy sin ti.

Cada palabra que digo
y cada cosa que veo
me dicen que estoy contigo
y que siempre seré preso*.

Eres una sombra
que ya no tiene voz
pero yo estoy oyéndote
como a mi corazón.

Hay el amor de quien ama
mientras ama hay el amor;
hay el amor del que olvida
y amor que duele es dolor.

Fácil se olvida el amor,
yo tengo la certidumbre;
lo que produce dolor
es olvidar la costumbre.
autor: Darío Jaramillo Agudelo
"Del amor, del olvido"

Gracias Rafa por el regalo de este librito (en tan relevante fecha) que ha hecho posible conocer de primera mano a este sensitivo autor amante de los amores posibles e imposibles.



2 de marzo de 2011

Sopa de letras


Sorprendentemente, durante esta semana y en todas y cada una de las sopas de letras que hemos ingerido solo lograbamos distinguir una letra,
la L
Enhorabuena bichitta.