Este año no oigo hablar de una silla vacía, sino de "pon una silla de mas". Son cosas de la tele, porque en la realidad, cuando una silla se queda vacía, son muchas las que no se vuelven a llenar. Porque en el hogar que entra la muerte, no quieren estar ni los dueños.
Y eso no quiere decir que no deseemos a los demás felicidad y lo mejor. Ni que realicemos pequeños rituales, pensando que brindamos por ti. Porque el ser humano trata de normalizar la anormalidad. Pero no nos pueden pedir que sigamos como si no hubiera pasado nada.
Otro año sin tí hijo y en 2015 ya serán 7 años. Que tristes son las navidades sin ti.
Te queremos.
Mamá.
Mamá.