volviendo... ...

Vuelvo a Madrid
tras un agosto baldío
sigo sin admitir por injusto
tu súbito y enmudecido marchar.

Que prisas tenían
los que nos dejaron sin despedida
acaso un día más bastaría
quizás una hora con tu mirar.

Toda historia tiene un principio
toda vida lleva a un final
pero tu ida
solo es herida
que el alma jamás cicatrizará.

No me daré por vencido
nunca lo hubiera creído
un hijo se nos ha ido
para muchos amigo
con solo veintiún años cumplidos.

Marché en julio hastiado
vuelvo al otoño
mas canoso y anciano.

por Villamanrique todo parece igual.

El tiempo sigue sin existirme y los atardeceres enmudecen a la luz con el mismo cariño y ternura que una madre acuna a su pequeño, al terminar el día.

Por los Londres tu hermana se soltó y creo, que a pesar de todo, disfrutó de la escapada.